Ona apareció abandonada en una carretera…
Llegó a nuestra protectora y, gracias a los cuidados de una familia de acogida, ha podido recuperarse por completo, ya que vino con filaria.
Benditas sean las familias de acogida, que hacen posible estos milagros.
Hoy Ona ha sido adoptada por una persona maravillosa, y juntas forman un tándem espectacular.
¡Mil gracias por adoptar y no comprar!
